Aprueban reforma constitucional en materia de bienestar animal y derecho a un medio ambiente sano

Chihuahua. — El Congreso del Estado de Chihuahua aprobó una reforma a la Constitución local que incorpora de manera expresa el derecho humano a un medio ambiente sano y eleva a rango constitucional la protección y bienestar de los animales, con lo que la entidad se suma a las tendencias nacionales e internacionales en materia ambiental y de respeto a los seres sintientes.
La reforma adiciona párrafos al artículo 4° de la Constitución Política del Estado, estableciendo la prohibición del maltrato animal y la obligación del Estado de garantizar condiciones mínimas de bienestar para todas las especies. Asimismo, refuerza la obligación de proteger el medio ambiente como condición indispensable para el desarrollo integral de las personas.
El dictamen fue elaborado por la Comisión de Medio Ambiente, Ecología y Desarrollo Sustentable, presidida por el diputado Octavio Borunda, tras un proceso que incluyó la instalación de una Mesa Técnica en Bienestar Animal, integrada por académicos de la Universidad Autónoma de Chihuahua, la Universidad Autónoma de Ciudad Juárez y el ITESM Campus Chihuahua, además de representantes de dependencias estatales y federales.
Durante los foros de consulta realizados en Ciudad Juárez y Chihuahua capital, organizaciones civiles respaldaron la iniciativa, calificándola como un avance histórico. No se recibieron observaciones negativas en el Buzón Legislativo.
La diputada Rosana Díaz, secretaria de la Comisión, junto con las legisladoras Nancy Frías y Jael Argüelles, y los diputados Edin Cuauhtémoc Estrada Sotelo y Carlos Olson San Vicente, impulsaron activamente el proceso.
La reforma local guarda armonía con la modificación aprobada en 2024 a la Constitución Federal, que reconoció la protección de los animales a nivel nacional y estableció la creación de una Ley General en Materia de Bienestar Animal.
Con este decreto, Chihuahua se convierte en una de las entidades pioneras en consolidar un marco constitucional que reconoce a los animales como seres sintientes y establece la obligación estatal de promover políticas públicas que fortalezcan la cultura del respeto y la empatía hacia todas las formas de vida.